Manual_DigitALAD_ES

14 C3. Práctica reflexiva La Práctica reflexiva es la autoevaluación formativa sobre las prácticas pedagógicas digitales una persona o de la comunidad educativa. Ejemplos de uso de la competencia: La evaluación es el principal vehículo de mejora. La práctica reflexiva ofrece oportunidades de mejora a educadores mediante el análisis de sus progresos, habilidades, competencias y capacidades. Se trata de identificar los puntos fuertes y débiles. Este análisis puede conducir a la mejora de las capacidades existentes y al desarrollo de otras nuevas. La práctica reflexiva implica un pensamiento crítico sobre el proceso de enseñanza- aprendizaje y la calidad de la práctica digital por parte de la misma persona. Por lo tanto, las actividades de la práctica reflexiva implican: • Identificar lagunas y áreas para mejorar la práctica digital y pedagógica • Buscar las necesidades de formación, las oportunidades de aprendizaje y las personas clave para ayudar en este proceso • Explorar nuevas prácticas digitales y mejorar continuamente las existentes • Apoyar a otras personas en el desarrollo de su competencia digital • Reflexionar sobre las políticas y los procedimientos digitales de la organización, aportar comentarios y contribuir a su mejora. ¿Cómo mejorar la Práctica reflexiva? Neil Thompson 3 sugiere los siguientes pasos para mejorar la Práctica reflexiva: • Leer sobre lo que te gustaría aprender y mejorar, o sobre las competencias digitales que se valoran en tu profesión y tu contexto. • Participar en los debates en línea relacionados: preguntar a otras personas en los foros cómo han conseguido mejorar sus competencias y por qué. • Observar las respuestas del resto, incluidos estudiantes, compañeros y compañeras de trabajo; reflexionar sobre cómo reaccionan a tus prácticas. ¿Cuáles son sus respuestas y reacciones? 3 Thompson, N. (1996). People Skills. London: Palgrave